Alexis Guerrera no tiene dudas de las marcadas diferencias que existen entre lo que propone Sergio Massa si llega a ser presidente de la Nación respecto de Juntos por el Cambio o La Libertad Avanza, dos rivales directos de Unión por la Patria rumbo a las presidenciales de octubre. El vocero político del precandidato presidencial señala a LA GACETA que, a lo largo de su carrera política e institucional, el actual ministro de Economía cosechó un profundo conocimiento de las realidades de cada una de las provincias. “Sergio tiene un gran conocimiento de lo que pasa en el país; sabe lo que pasa en cada rincón de la Argentina; no es un pituquito de Recoleta”, afirma el ex ministro de Transporte de la Nación, recordando aquella frase del gobernador electo de Córdoba, Martín Llaryora para marcar diferencias con los precandidatos presidenciales de Juntos por el Cambio, Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich.

"Pituquitos de Recoleta": qué dijo Rodríguez Larreta sobre las críticas de Martín Llaryora

-La gira por el interior coincidió con el acuerdo del país con el FMI. ¿Esa situación puede potenciar la candidatura de Massa?

-Nuestras expectativas son las mejores. Sergio emprendió una recorrida por San Juan, La Rioja y ahora Tucumán. Estamos escuchando a todos los gobernadores del Norte Grande, a los del NOA y a los del NEA. Mientras se avanza con esa estrategia, la Argentina se encuentra con la firma del acuerdo con el FMI, que descomprime los vencimientos de la deuda que teníamos para este año. Con eso se alcanza previsibilidad para la economía argentina con el fin de recrear la llegada de inversiones nacionales y extranjeras. También le permite al ministro Massa tomar más medidas de política que signifiquen revitalizar al mercado interno y, así, frenar la caída de la actividad. En el camino de esta negociación con el organismos nos encontramos con algunos agoreros que planteaban que no era posible; y fue posible por la tenacidad de Massa para alcanzar el entendimiento que le permitirá a la Argentina transitar sin grandes sobresaltos hasta fnes de año, acumulando reservas, cumpliendo con los desembolsos y permitir que las importaciones no se vean alteradas por falta de moneda extranjera.

-La oposición recuerda que Massa es el ministro de los tres dígitos de inflación...

-Son esos agoreros que no solamente hablan, sino también que intentaron boicotear el acuerdo con el FMI. No lo lograron. Sergio hoy se posiciona en un mejor lugar porque, junto con un equipo, pudo reformular aquel crédito que contrajo la Argentina en tiempos de Mauricio Macri como presidente de la Nación. Y enfatizo: es bueno recordar que Macri contrajo ese préstamo que hoy esta gestión trata de solucionar el problema ocasionado al recurrir a un prestamista de última instancia. Y no es una cuestión menor si tomamos en cuenta que, en el medio, hubo pandemia de Covid y dificultades económicas que ocasionó la guerra entre Rusia y Ucrania que derivó en que el valor de los commodities de energía volaran por el cielo y, así, la Argentina tuvo que desembolsar más de U$S 7.000 millones extra. Por si esto fuera poco, la sequía dejó al país sin otors U$S 20.000 millones con los que se pudo haber afrontado vencimientos de la deuda.

-¿Y cuál fue la incidencia de Massa en ese proceso?

-Con todas esas dificultades, su llegada al Ministerio de Economía le dio previsibilidad, certeza y confianza a los mercados internacionales; de otro modo, el FMI no habría accedido a replantear el convenio por el crédito. Hoy Sergio se posiciona de un modo diferente. Empieza a ordenar la economía y algunos indicadores, como la inflación, mejoran mes a mes. No hay que perder de vista otros indicadores. Por ejemplo, llevamos 33 meses consecutivos de crecimiento del empleo. Se recuperaron 328.000 puestos genuinos en el sector privado. Durante la gestión de Macri se perdieron 250.000. En ese gobierno de Cambiemos, además, la actividad cayó un 13,5%, mientras que con nosotros creció un 14,6%. Entonces, para que hablen del ministro de los tres dígitos de inflación, antes deberían acordarse en que circunstancias dejaron el país y cómo lo agarró el actual gobierno.

-¿Cuándo se terminará de ordenar la economía?

-Es una cuestión de tiempo, pero será de forma paulatina. Se ordena porque hay alguien que está ordenando las cosas; tiene nombre y apellido y se llama Sergio Massa. En algún momento nos prometieron a los argentinos una lluvia de inversiones externa. Antes de esta gestión cayó un 2% y ahora, en los casi 10 meses que Massa lleva de gestión viene creciendo a razón del 5.5% del Producto. Tanto martillaron la cabeza sobre el riesgo país en tiempos de Cristina Kirchner, pero Macri lo quintuplicó. Él causó la desconfianza del mercado internacional en el país. En consecuencia, si nos ponemos a analizar los números duros de la actividad económica argentina, está claro que la propuesta de Juntos por el Cambio es volver al pasado y produce escalofríos que refloten términos como blindaje. De aquel gobierno de la crisis fueron parte Bullrich y Rodríguez Larreta. Hablan de megacanje, pero entre los opositores se observan claras diferencias cuando hablan acerca de cómo encarar la eliminación del cepo cambiario. Hay una candidata que no lo sabe explicar y que habla de los Pac-Man; otro que propicia la dolarización. Hay experiencias en Latinoamerica que nos enseñaron que esa dolarización no es buena, que atenta contra la productividad y contra la generación de empleo porque no existe política monetaria propia.

-¿Qué roles ocupan los gobernadores en el esquema político e institucional que impulsa el precandidato presidencial?

-Sergio está recorriendo la Argentina contándole a los trabajadores y a las trabajadores, a los vecinos y a las vecinas sobre lo que significa gobernar en estas circunstancias y, en ese sentido, necesita del fuerte acompañamiento de los gobernadores que, en el caso de Tucumán, se lo dan tanto Juan Manzur como el electo gobernador Osvaldo Jaldo. Sergio tiene un gran conocimiento de lo que pasa en cada distrito, en lo que sucede en el interior porque no es un pituquito de Recoleta como dijo el gobernador electo de Córdoba (Martín Llaryora). Sabe lo que pasa en cada rincón de la patria. Co también la realidad de las economías regionales. Desde la oposición se venía hablando de las 200 retenciones que se le aplican a las economías regionales y sólo quedan seis. Ese argumento es una mentira opositora. A partir del 1 de septiembre desaparecerán las pocas retenciones que quedan en esa franja de la economía.

-Massa habla de la necesidad de seguir fortaleciendo el federalismo. ¿Se lo plantearon a los gobernadores?

-La participación de ellos no sólo es fundamental en la campaña, porque también esos gobernadores serán los protagonistas en el futuro gobierno de Sergio Massa. La gobernabilidad no se hace desde el centro hacia la periferia, sino desde esa periferia hacia el centro. El Norte Grande, en los últimos tiempos, nos ha demostrado que la Argentina puede desarrollarse de esa manera, pese a las dificultades económicas que atravesamos. Se reactivó la industria regional y local; se generó mano de obra y algunos índices económicos son mejores que los que tiene la región central por el impacto que tuvo en esta zona la sequía, tanto en la actividad agrícola como también en la ganadera. Massa tiene una mirada integral de cada una de las regiones del país, la mirada de una Argentina productiva e industrializada. No somos ilusos que para apuntalar las producciones y la industrialización de la ruralidad lleva tiempo. Pero sí estamos seguros que ese es el camino para que cambie la balanza comercial, que se exporte más de lo que se importa. Hay que agregar valor a la economía.